La escultura interactiva "Zoide Óidar" y la instalación "El Gran Otro" fueron expuestas en el Museo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, como parte de la muestra "Plataforma UNTreF" curada por Graciela Taquini.
Para esta ocasión trabajamos las obras en relación con el concepto que Graciela Taquini propuso para la muestra: La UNTREF como plataforma de despegue, de llegada y salida.
Entonces, colocamos a "El Gran Otro" en la sala de espera, un lugar propicio para contemplar, meditar, pensar en nuestros viajes y proyectar la realización de nuestros sueños. Expusimos el cuento que forma parte de la obra, como un folleto de seguridad que se entregaba en la sala de embarque para poder realizar el viaje con la tranquilidad de que vamos a llegar a salvo a nuestro destino.
A "Zoide ÓidÁr" le tocó otro espacio, formar parte de la sala de máquinas que permite mantener la nave en su curso. En esta ocasión pensamos a esta escultura interactiva como una gran antena de comunicación que estuvo a cargo en esta muestra, de obtener información del espacio exterior para asegurarle un rumbo exitoso.
Rodrigo Alonso:
"El trabajo de IQLab explora las lábiles fronteras entre la realidad y su representación, entre la traducción analógica y digital del mundo, entre el arte la ciencia y la tecnología. Movido por la voluntad de experimentación, sus producciones son más bien interfases entre el universo tecnológico y el imaginario, catalizadores de experiencias estéticas pero también de incertidumbres y reflexión.
Zóide ÓidÁr es un dispositivo traductor que transforma ondas, movimientos e interferencias en una suerte de concierto sonoro. Atenta al contexto espectral y cinético, una imponente estructura metálica hace las veces de huésped sensorial, tornando su naturaleza industrial y tecnológica en fuente de una experiencia estética, abierta y participativa.
En El Gran Otro una almohada modela el cuerpo del espectador mientras este lee un cuento fantástico. El movimiento del objeto inanimado, uno de los grandes tópicos de la literatura fantástica, penetra aquí en el entorno inmediato del lector potenciando ese sentimiento que Sigmund Freud caracterizó como siniestro."